Fuerte cruce entre el INCAA y la industria del cine: acusan a la gestión de no aprobar películas en un año
El Espacio Audiovisual Nacional (EAN) denunció parálisis en el fomento al cine argentino. Carlos Pirovano, titular del INCAA, respondió con dureza y aseguró que “se quejan porque no les regalamos más plata”.
Una nueva polémica sacude al mundo del cine nacional. El Espacio Audiovisual Nacional (EAN), que agrupa a directores, productores y guionistas, emitió un comunicado lapidario contra la gestión de Carlos Pirovano al frente del INCAA, acusándolo de haber aprobado “cero películas argentinas” en más de un año de gestión.
Según el EAN, todas las medidas adoptadas durante 2024 y lo que va de 2025 han afectado negativamente al desarrollo de la industria audiovisual nacional, eliminando instrumentos clave de fomento y difusión.
La respuesta del INCAA: “No vamos a subsidiar promesas”
Pirovano salió rápidamente al cruce. En diálogo con Infobae, desmintió categóricamente la denuncia y explicó que sí se aprobaron películas, pero solo en etapas avanzadas y no en preproducción. “Lo que no hemos aprobado son declaraciones de interés de preclasificación, eso se preabolió porque era ilegal”, afirmó.
“No se puede cobrar un subsidio por una película que no se hizo. Recuperamos 300 millones de pesos que se iban en promesas que no llegaban a rodaje”, enfatizó.
El titular del INCAA sostuvo que la nueva política busca priorizar la eficiencia y la transparencia: las películas se evaluarán una vez terminadas, y recibirán subsidios en función de su rendimiento de audiencia.
Subsidios eliminados, créditos accesibles
Otra de las principales críticas del EAN fue la eliminación de los anticipos y subsidios tradicionales a la producción cinematográfica. Según Pirovano, estos fueron reemplazados por una línea de microcréditos a cinco años, con tres de gracia, por hasta 50 mil dólares, “a una tasa más baja que la de un plazo fijo”.
“Ahora no se regala plata. El productor tiene que demostrar que es solvente y que tiene un proyecto real. Y si elige no tomar un crédito, es su decisión”, señaló.
Difusión y festivales, otros focos de conflicto
El EAN también denunció la falta de apoyo a la exhibición y difusión del cine nacional. Antes existía un subsidio directo a los distribuidores; hoy, ese monto se transfiere directamente a los productores.
“Premiamos con 500 mil dólares anuales a cada cine que mantenga un 20% o más de contenido nacional durante el año”, explicó el titular del INCAA.
Respecto al festival Ventana Sur, que en 2024 se realizó en Montevideo, Pirovano confirmó que volverá a Buenos Aires este diciembre, y desmintió cualquier intento de desarticularlo.
También defendió la última edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, asegurando que “salió bárbaro”, y acusó al EAN de “hacer comunicados para el kirchnerismo, porque se quedaron sin plata”.
Recortes, premios y proyecciones
La gestión de Pirovano también llevó adelante un ajuste sin precedentes: despidió a 500 empleados del INCAA, reduciendo la planta de 800 a 261 personas. “Pasamos de un déficit de 4 millones de dólares a un superávit del mismo valor en cuatro meses”, destacó.
En paralelo, se destinaron 4 millones de dólares en premios a óperas primas, series cortas, guiones y obras terminadas. “Nadie puede decir que no apoyamos la producción. Pero ahora hay que rendir cuentas”, aseguró.
¿Una nueva etapa o el final de una era?
La grieta entre el INCAA y buena parte del sector audiovisual parece profundizarse. Para algunos, la gestión actual representa una necesaria reforma al modelo de subsidios; para otros, significa la parálisis del cine nacional.
El debate promete continuar, especialmente de cara a los próximos festivales y con un año electoral en puerta, donde la cultura y la política vuelven a cruzarse en el centro de la escena.
