La realidad supera a la ficción, pero, más aún, supera a las palabras. Por más que uno se esfuerce en dichos bien armados o de cierto propósito, a veces, lo que sucede muestra la única verdad.
El gobernador de la provincia de Chaco, Jorge Milton Capitanich, vivió un momento insólito que se viralizó en las redes sociales. Estaba dando una charla en la presentación de los Torneos Intercolegiales del Norte Grande 2022, cuando dijo: “Disfruten este momento, que nosotros estamos haciendo todo lo mejor en infraestructura, los profesores pondrán lo que…”. En ese instante, como rayo fulminante se cortó la energía eléctrica. El gobernador miró hacia los costados, buscando complicidad para superar el momento, y rápidamente concluyó su discurso con un aplauso.
Su posterior recorrida de las instalaciones y algunas jugadas de vóley con los estudiantes quedaron opacadas al lado de la urticante relación palabra-realidad vivida momentos antes.
No es la primera vez que se convierte en centro de un papelón. En octubre del año pasado, se lo vio, casi entre lágrimas, abrir una canilla en casa de una vecina en Charata, inaugurando simbólicamente una obra en la pequeña localidad en el sudoeste de la provincia, que no contaba con red de agua potable desde hace más de 100 años. Obviamente las críticas sobre su conmoción no tardaron un siglo en aparecer.