Y sigue girando la rueda. El presidente de la Nación continúa moviendo la estructura que lo rodea. Nombró a Victoria Tolosa Paz en el Ministerio de Desarrollo Social; a Ayelén Mazzina, en el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad; y a Raquel “Kelly” Olmos, en el Ministerio de Trabajo.
Después de la pandemia, en el fútbol se instauraron cinco cambios por equipo, medida muy resistida actualmente, porque desnaturaliza el juego al permitir que sobre 22 jugadores pueda haber diez renovaciones en la cancha. Cualquier parecido con la realidad política argentina es pura coincidencia.
Tolosa Paz (foto) reemplazará a Juan Zabaleta, Mazzina a Elizabeth Gómez Alcorta y “Kelly” Olmos a Claudio Moroni en los ministerios de Desarrollo Social; Mujeres, Géneros y Diversidad; y Trabajo. Según el comunicado oficial, el objetivo es “profundizar la amplitud de miradas y la eficiencia en la gestión”. Sin embargo, los argentinos reciben la noticia con diferentes lecturas.
Zabaleta y Moroni fueron dos fieles albertistas. Habían enfrentado tenazmente la crítica de Cristina Kirchner hacia los “funcionarios que no funcionan”, que halló la víctima más destacada en Martín Guzmán. Ya no están más.
Alberto Fernández sigue doblando el codo y recurrió a Tolosa Paz y Olmos. Tolosa Paz es esposa de su amigo Enrique Albistur y la eligió como cabeza de la boleta a diputados nacionales en la provincia de Buenos Aires; Olmos es una histórica militante del Partido Justicialista porteño. Mazzina es un guiño al gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, que a fines de septiembre había recibido con marcados elogios a Alberto Fernández en su provincia.
