El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, cuestionó el accionar de la Policía de la Ciudad y le recomendó a su flamante par porteño, Eugenio Burzaco, que no lo llame porque “se va a comer flor de puteada”.
“La Argentina no puede seguir en este estado de violencia, no puede dirimir los conflictos gremiales así y la política no puede fomentar la violencia. Yo le puedo garantizar que hay una metodología de incitación a la violencia por parte de algunos sectores políticos en algunos distritos que convocan a los medios de manera injustificada y cuando se prenden las cámaras empiezan la excitación”, denunció el funcionario bonaerense.
Durante una entrevista en una señal de noticias, Berni aseguró que los incidentes comenzaron cuando, en medio de los forcejeos con los manifestantes, quiso “proteger a un trabajador” al que uno de los efectivos “le pegó un escudazo de manera incalificable”.
“(La Policía de la Ciudad) me lleva detenido y, la verdad, durante todo el tiempo, cuidándome un flanco contra la pared, durante 20 minutos pudimos tranquilizar la situación, estábamos viendo dónde nos reuníamos y cuando ya estaba todo listo, aparece la Infantería y les pido por favor que no avancen, que se queden ahí, porque me dicen ‘van a reprimir’”, precisó.