La emergencia hídrica está a un paso de convertirse en pesadilla. Montevideo y sus alrededores están agotando sus reservas de agua dulce. Las autoridades calculan que de las canillas no saldrá una gota de agua potable en un plazo que oscila entre 6 a 10 días.
Los números asustan. La represa de Paso Severino, la principal fuente de agua dulce que alimenta a la capital y sus zonas aledañas, tiene una capacidad de 67 millones de metros cúbicos. El último reporte oficial menciona que hay poco más de 1,1 millones de metros cúbicos, el 1,7% de su volumen total.
Hoy un tercio del agua que se consume a diario viene de esa fuente de agua dulce. Los dos tercios restantes se están extrayendo del Río de la Plata, que presenta un elevado contenido de sal. La mezcla que sale de los grifos tiene un marcado gusto salado. Ya no se la considera potable, pero sí segura.
Sin embargo, esto podría cambiar en algunos días. La “hora cero” está a pocas horas de distancia.