Aportó US$ 24.933 millones de los US$ 35.339 millones en ese período. Representa un alza del 28,3% interanual e incluso supera los niveles prepandemia.

La cadena agroindustrial exportó por US$ 24.933 millones, el 70,5% de las ventas externas argentinas durante la primera mitad del 2021, período en el que se alcanzó el mayor monto en dólares de los últimos 6 años, con US$ 35.339 millones.

Un informe elaborado por el consultor Marcelo Elizondo destaca que en el primer semestre se logró un incremento del 28,3% interanual en el total de bienes exportados, mostrando una fuerte recuperación tras un 2020 en que el comercio global se vio afectado por la pandemia, e incluso respecto al 2019, cuando todavía no existía este problema sanitario y se habían logrado US$ 30.752 millones.

De lo propiciado ahora por el campo, US$ 15.434 millones pertenecieron a las manufacturas de origen agropecuario (por ejemplo, harinas y aceites), con un crecimiento del 47,2%, y US$ 9.499 millones correspondieron a los denominados bienes primarios (cuyo protagonismo está marcado por los granos).

En su trabajo, Elizondo menciona que el comercio exterior del país se “agrodependiza” crecientemente. Al respecto, ejemplifica que en el primer semestre del 2014, cuando se habían alcanzado los US$ 36.820 millones, que superaron al actual guarismo, las exportaciones de origen agropecuario eran menos representativas que ahora, ya que abarcaron un 60% del total.

En el único caso, al menos durante los últimos 7 años allí analizados, que se había alcanzado una participación del campo superior al 70% fue en 2020, con el 72%. Un año claramente excepcional, porque las cuarentenas estrictas afectaron especialmente a la industria en todo el planeta, generando una mayor dependencia del sector en varios países agrícolas.

El informe analiza que el fuerte repunte en la recaudación de las exportaciones totales de bienes se debe a los mejores precios internacionales, y no necesariamente un salto relevante en los volúmenes, que hasta retroceden.

Mayor peso de Asia y menos relación con el “vecindario”

Elizondo señala que la agro-dependencia en las exportaciones va de la mano con la mayor vinculación comercial con Asia, que supera a las relaciones de nuestro país con el resto del mundo. Esto, se asevera en el estudio, confirma que el comercio argentino se “deslatinoamericaniza”.

De hecho, en el primer semestre de 2021, el 35% de las exportaciones nacionales se enviaron a mercados asiáticos. Y, en particular, a Asia Oriental, que se llevó un 27%. Mismo porcentaje que alcanzaron, juntas, todas las naciones latinoamericanas.

En tanto, en la primera parte del 2014, Latinoamérica representaba un 36%, y en 2015 un 35%, comenzando un descenso desde entonces, ya que en 2016 abarcó un 29% de los envíos argentinos al exterior.

Por otro lado, el consultor hace referencia a la merma de intercambios de distintos bienes con Brasil, nuestro histórico socio. Al respecto, cita datos del INDEC, que demuestran que la participación de la nación vecina en las exportaciones argentinas fue del 21,16% en 2010, mientras que en 2019 tocaron el 16,64%, y en 2020 cayeron a su nivel más bajo de los 11 años analizados, con el 14,49%.

El mismo fenómeno se dio a la inversa: la influencia de Brasil en las importaciones argentinas descendió del 31,25%, en 2010, a un 20,5% durante el año pasado.

Por último, el consultor evalúa que ese proceso es esperable que se acreciente en la medida en que Asia siga generando 10 veces más de importaciones desde todo el mundo respecto de lo que le compra a Latinoamérica.