Es la máxima marca histórica para el octavo mes del año, en el que habitualmente merman las liquidaciones. En lo que va de 2021, las exportaciones de granos y derivados suman US$23.200 millones.
El campo sigue aportando dólares a valores récord. Cuando los pronósticos auguran que en el segundo semestre mermará la liquidación de divisas, como sucede todos los años luego del segundo trimestre, por lógica estacional ligada a la cosecha, en agosto se llegó a un monto nunca antes alcanzado en ese mes en los registros históricos: US$ 3.050 millones.
Esa suma mensual refleja, sin embargo, una declinación el 13,35 % con respecto al precedente mes de julio. Pero es un incremento del 74,97 % en relación con el mismo mes de agosto del año anterior, según informó leste miércoles la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan el 48 % de las exportaciones argentinas.
Asimismo, el ingreso de divisas acumulado de la agroexportación en los primeros ocho meses del año alcanzó los US$23.229 millones. También refleja un incremento del 74 % con respecto al mismo período del año pasado y récord absoluto para el mismo período desde comienzos de este siglo.
“Los precios internacionales de los commodities resultaron un atractivo que le dieron fluidez a las ventas de los productores”, destacó CIARA-CEC, “no obstante, los resultados se alcanzaron por los significativos esfuerzos logísticos a los que obligó la histórica baja del río Paraná”.
POR SU PRECIO, LA SOJA SIGUE LIDERANDO EL APORTE
El complejo oleaginoso-cerealero, incluyendo al biodiésel y sus derivados, aportó el año pasado el 48% del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del INDEC.
El principal producto de exportación del país es la harina de soja (14,2 % del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial, que tiene actualmente una elevada capacidad ociosa cercana al 50%. El segundo producto más exportado el año pasado, de acuerdo con el INDEC, fue el maíz (11 %) y el tercero fue el aceite de soja (6,9 %). Si bien en volumen de cosecha el maíz ha conseguido el liderazgo a nivel nacional, el precio internacional de la soja es más del doble que el del cereal y tiene un mayor grado de industrialización en las ventas externas. En ese sentido, el aceite de soja se embarca en menor cantidad que el maíz pero vale tres veces más (US$1308) que el grano oleaginoso (US$477) y casi 6 veces más que el cereal americano (US$210).
Según datos publicados por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), se prevé que la Argentina mantenga el primer puesto mundial en las exportaciones 2020/21 de aceite y harina de soja.
Solo el complejo soja, que representó el 27% de las exportaciones totales de la Argentina del año pasado, constituye el 16% (344.865 puestos) del empleo generado en 2017 por todas las cadenas agroindustriales, según un informe del Ministerio de Trabajo de la Nación.
Desde CIARA-CEC destacaron que “no existen retrasos en la liquidación de divisas, que está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial”.
También puntualizaron que esas operaciones están fuertemente “influidas por el ciclo comercial de los granos, que depende de diversos y cambiantes factores exógenos como oscilaciones internacionales de precios, retracción de la oferta, distinto volumen y valor proteico de las cosechas, condiciones climáticas, feriados, medidas de fuerza sindicales, modificaciones regulatorias, barreras arancelarias y para arancelarias del exterior, exigencias fitosanitarias o de calidad de otros países, etcétera”.