Además, salvo que el Gobierno logre destrabar un adelanto de desembolsos con el Fondo, no hay en el corto plazo una fuente de ingreso de divisas y habrá otros factores que sumarán más presión a las reservas. El Gobierno deberá enfrentar a fines de julio un cronograma de compromisos más que exigente.
Después de haber postergado los vencimientos para fin de mes, deberá pagar unos US$2600 millones correspondientes a julio y todo parece indicar que -al igual que sucedió en junio-, el oficialismo se inclinaría por volver a utilizar los yuanes del swap con China para afrontar esos pagos.
El equipo económico postergó esos vencimientos para fin de mes para intentar ganar tiempo y evitar perder más divisas, mientras espera alcanzar un acuerdo cuanto antes.