El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha emitido una clara advertencia sobre el futuro de la economía global, anticipando una desaceleración significativa en 2025 como consecuencia directa del endurecimiento de las políticas comerciales implementadas por Estados Unidos. En su reciente informe de Perspectivas Económicas Globales (WEO), el organismo multilateral señala que las nuevas medidas arancelarias impuestas por Washington, sumadas a las contramedidas de sus socios comerciales, representan un golpe negativo considerable para el crecimiento económico mundial, afectando especialmente a las economías emergentes y en desarrollo, incluyendo a América Latina.
Argentina Recibe un Respiro en Medio de la Turbulencia Global: Perspectiva de Crecimiento del 5,5%
En contraste con el panorama global sombrío, el último informe técnico publicado por el equipo del FMI tras el acuerdo alcanzado con el gobierno argentino ofrece una perspectiva relativamente positiva para el país. El organismo multilateral mantiene su previsión de un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 5,5% para 2025, acompañado de una inflación anual que se proyecta en un rango de entre el 18% y el 23%.
Confianza como Motor del Optimismo: La Visión del FMI sobre la Economía Argentina
Petya Koeva-Brooks, directora del departamento de investigación del FMI, al ser consultada sobre si los aranceles recíprocos impuestos por la administración estadounidense podrían afectar las predicciones para Argentina, fue categórica: «Todavía mantenemos la mejora del 5,5% para Argentina. Y esto está relacionado con las sorpresas positivas que hemos visto a pesar de un ajuste fiscal muy fuerte. Creo que la recuperación de la confianza ha influido en gran medida en este pronóstico». Esta declaración subraya la importancia que el FMI otorga a la mejora en la confianza como factor clave para el desempeño económico argentino.
El Impacto Global de la Política Arancelaria de EEUU: Mayores Costos e Incertidumbre
El FMI detalla cómo la reciente batería de aranceles aplicados por Estados Unidos, que llevaron los niveles efectivos de tarifas a máximos históricos en más de un siglo, generarán mayores costos, tensiones comerciales y una marcada incertidumbre a nivel global. Este giro proteccionista desalienta la inversión y reduce el dinamismo del comercio internacional, complicando la formulación de proyecciones consistentes y agravando la fragilidad de la recuperación económica mundial.
Revisión a la Baja del Crecimiento Global: Un Escenario Internacional Deteriorado
Como consecuencia de estas políticas, el FMI ha revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento global para 2025 y 2026. Se espera que la economía mundial crezca un 2,8% en 2025 y un 3% en 2026, cifras inferiores al 3,3% estimado para ambos años en el informe de enero. Esta corrección acumulada de 0,8 puntos porcentuales sitúa el crecimiento global muy por debajo del promedio histórico de 3,7% registrado entre 2000 y 2019.
Estados Unidos y la Eurozona Sienten el Impacto: Desaceleración en las Economías Avanzadas
En los países avanzados, el crecimiento proyectado para 2025 cae al 1,4%. Estados Unidos, en particular, experimentaría una desaceleración significativa hasta el 1,8%, lo que implica una rebaja de 0,9 puntos porcentuales respecto a las previsiones anteriores. La incertidumbre, las tensiones comerciales y una demanda más débil son los principales factores que explican esta corrección. En la eurozona, se espera un crecimiento del 0,8%, con una leve baja de 0,2 puntos porcentuales.
Mercados Emergentes en la Mira: Mayor Vulnerabilidad ante las Tensiones Comerciales
El panorama para los mercados emergentes y las economías en desarrollo también se ensombrece, con una revisión a la baja del crecimiento al 3,7% para 2025. El informe del FMI destaca que las economías más expuestas a las nuevas medidas comerciales, con mención explícita a China, son las más afectadas. En este contexto, América Latina, dada su dependencia de los flujos comerciales y financieros internacionales, se encuentra entre las regiones más vulnerables.
Argentina en la Balanza: Entre el Optimismo del FMI y la Volatilidad Global
Si bien el WEO no dedica un apartado específico a Argentina más allá de las cifras del último informe técnico, el impacto de las tensiones comerciales sobre los mercados emergentes, especialmente aquellos con altos niveles de deuda y dependencia de exportaciones industriales o agrícolas como Argentina, es un factor crucial a considerar. El FMI advierte sobre la posible intensificación de la volatilidad cambiaria y los movimientos de capital, con consecuencias negativas para países con desequilibrios externos o limitada capacidad de respuesta fiscal.
Riesgos Adicionales y la Necesidad de Cooperación Internacional
El informe del FMI también identifica otros riesgos que podrían agravar el escenario internacional, incluyendo tensiones geopolíticas, cambios abruptos en los flujos de capital y ajustes bruscos en los mercados de divisas. La posibilidad de una escalada del conflicto comercial o respuestas unilaterales de otros países aumenta la probabilidad de una mayor disrupción del comercio global. Ante este panorama, el organismo multilateral insta a la coordinación de políticas y a la reducción de las tensiones comerciales, sugiriendo medidas internas como la restauración del espacio fiscal, el avance en reformas estructurales y el mantenimiento de políticas monetarias ajustadas. Para los mercados emergentes, el FMI plantea la posibilidad de «intervenir selectivamente en los mercados cambiarios» para mitigar la volatilidad y activar herramientas macroprudenciales ante señales de estrés.
Una Luz al Final del Túnel: La Posibilidad de Reversión Arancelaria y Nuevos Acuerdos
Finalmente, el FMI señala que una eventual reversión de los aranceles y la firma de nuevos acuerdos comerciales podrían ofrecer un respiro a la economía global: «Una desescalada desde los niveles actuales y nuevos acuerdos que proporcionen claridad y estabilidad en las políticas comerciales podrían elevar el crecimiento global». Esta observación subraya la importancia de la diplomacia y la cooperación internacional para evitar un mayor deterioro de las perspectivas económicas mundiales.