El Colegio Argentino de Cirujanos Cardiovasculares (Caccv) advirtió que faltan insumos básicas para realizar cirugías cardiovasculares, debido a las trabas a las importaciones impuestas por el Gobierno de Alberto Fernández.
El Colegio Argentino de Cirujanos Cardiovasculares comunicó oficialmente “una grave y peligrosa situación por la faltante de insumos básicos e imprescindibles para realizar cirugías cardiovasculares”.
Este faltante “está poniendo en riesgo la salud y la vida de los pacientes que requieren dichas cirugías. EI Caccv advierte a la población y a sus autoridades a los fines de que prontamente se arbitren los medios necesarios para poder solucionar dicho faltante», señalan el documento.
La dificultad para acceder a productos importados, creada por el gabinete que dirige Sergio Massa, afecta, entonces, ya no solo a la industria y las pymes argentinas sino también a la salud. Una vez más, lo que dice la ley no se cumple, ya que el nuevo Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), que establece el acceso a los dólares para importar, prioriza el ingreso de insumos médicos y medicamentos, pero eso no se ve en los quirófanos.
La Unión Industrial Argentina (UIA) emitió un comunicado, la semana pasada, en el que informó que el departamento de Comercio y Negociaciones Internacionales de la entidad había abordado la situación del SIRA: “Persisten muchas y graves dificultades para el acceso a insumos, el pago efectivo a proveedores del exterior y la falta de financiamiento para los plazos establecidos”, señaló.
“Los integrantes de la Junta Directiva fueron coincidentes en manifestar su gran preocupación y señalaron el impacto negativo que está generando en los sectores industriales de todo el país, comprometiendo la continuidad de procesos productivos”, siguió el comunicado de la cámara que agrupa a la industria.
El SIRA, hoy día, es simplemente una traba para el desarrollo productivo de las empresas argentinas que ni siquiera contempla si los productos no se fabrican en el país y si son de utilización urgente y no lujosa. “Además, el nuevo sistema ya implementado debe generar previsibilidad, evitar toda forma de discrecionalidad, así como también permitir planificar la producción de cara 2023”, concluyó la UIA.