Los mortales asaltos ocurrieron entre el martes a las 19 y el jueves a las 8 de la mañana en Lanús, Tres de Febrero y Quilmes, tres municipios donde la inseguridad golpea fuerte y que se vieron otra vez atravesados por el dolor, la impotencia y los reclamos a las autoridades.
Los tres hechos tienen como denominador común la brutalidad e inusitada violencia con la que actuaron los delincuentes -disparos y cuchilladas sin mediar riesgo para los agresores o resistencia de las víctimas-, la juventud de los autores de los asesinatos, y la precariedad en la acción, debido a que las acciones criminales quedaron registradas por cámaras de seguridad que permitieron identificar a los culpables.
En orden cronológico, el primer episodio lo protagonizó Gonzalo Refi, un joven emprendedor y experto en tecnología que fue engañado por falsos interesados en comprar equipamiento para minar criptomonedas.
El segundo, ocurrió dos horas después, a las 21, en Caseros, donde el subcomisario de la Policía de la Ciudad Rodrigo Guillermo Becker (41) recibió al menos tres balazos en pecho y abdomen por dos motochorros.
El tercer caso fue el de Lucas Cancino, un adolescentes de 17 años, estudiante secundario y que soñaba con ser ingeniero. Fue abordado minutos antes de las 8 por al menos dos muchachos de 19 y 20 años, Rodrigo Rivas y Nazareno Mejías, que quisieron robarle la bicicleta y otras pertenencias.