La nueva oferta incluye incrementos cada dos meses, hasta marzo de 2022. Los manifestantes autoconvocados mantendrán los cortes de ruta y, si bien evaluarán en distintas asambleas la propuesta, ya adelantaron a Infobae que la consideran “vergonzosa”.
En busca de cerrar el conflicto en Neuquén, el Gobierno provincial les propuso a los estatales un aumento que llega al 53% del sueldo básico. Sin embargo, las disidencias están lejos de terminarse.
La nueva oferta estructura incrementos cada dos meses, hasta marzo de 2022, alcanzando un aumento final del 53,1%. El acuerdo contempla beneficios específicos para los trabajadores de la salud e incluye también al sector pasivo. Para ello, el Gobierno neuquino prepara un proyecto de ley de financiamiento para obtener los recursos. No obstante, los manifestantes autoconvocados mantendrán los cortes de rutas y, si bien evaluarán entre hoy y mañana si aceptan la propuesta en distintas asambleas, ya anticiparon a Infobae que la consideran “vergonzosa”.
De acuerdo a la oferta, en mayo se abonaría el primer tramo del aumento para el sector de la salud, que también recibirá los tres bonos de 6.500 pesos anunciados por el gobierno nacional. Asimismo, se pagarían 40.000 pesos adicionales en concepto de ropa de trabajo en dos pagos a partir de mayo o junio, según lo previsto en los convenios colectivos de trabajo. Además, ante la segunda ola de coronavirus, se pasaría a planta permanente a los trabajadores eventuales de Salud y Desarrollo Social en forma progresiva.
“Es una vergüenza, van a desparramar ese 53% como una victoria. En todos los hospitales están hablando de lo vergonzosa que es la propuesta. Es el 15% que ya nos dieron y después un 5% cada dos meses hasta 2022. Eso es una burla. Encima está todo lo que nos deben de 2020, que no nos dieron los aumentos. Ponen el dinero de la ropa, que ya estaba en el convenio y nunca lo pagaron. Si creen que vamos a aceptar esto están equivocados. Al 53% se le resta el 15% que ya nos dieron y la diferencia son los aumentos repartidos en casi dos años”, afirmó Delia, una de las manifestantes autoconvocadas en Neuquén.
El conflicto del gobierno de Neuquén con trabajadores de la Salud, latente desde marzo, se precipitó cuando un grupo de autoconvocados rechazó el acuerdo salarial que el gremio ATE (Asociación de Trabajadores del Estado) había acordado con la administración del gobernador Omar Gutiérrez. Los cortes de ruta se iniciaron el 7 de abril. Actualmente, unos 1.000 empleados de la Salud (sobre un total de 10.500) mantienen varias rutas provinciales y nacionales cortadas, generando pérdidas millonarias en Vaca Muerta, principal reserva de petróleo y gas de la Argentina, cuya actividad se paralizó.
Los manifestantes pidieron un aumento del 40% del sueldo básico, pero el Gobierno provincial les ofreció un bono de $30.000, luego elevado a $40.000. Por supuesto, cambio de que levantaran los cortes, lo que fue rechazado por los autoconvocados. De esta forma, las distintas concentraciones continúan en Neuquén capital, Senillosa, Plaza Huincul, Zapala, Picún Leufú, Chos Malal, Villa La Angostura, Rincón de los Sauces, Añelo y San Patricio del Chañar y también hubo bloqueo en los puentes carreteros que conectan la capital neuquina con Cipolletti (Río Negro). El viernes pasado Gendarmería intentó desbloquear un corte en La Angostura, para permitir el paso de camiones varados, pero lo impidió una movilización en la que participó el obispo Fernando Croxatto. Finalmente, la medida se profundizó y el corte se volvió total.
Los bloqueos, encabezados por sectores sin representación gremial, provocaron la reacción de la CGT, que en un comunicado firmado por 20 sindicatos (entre ellos Uocra, Smata, Gastronómicos, Camioneros, Petroleros, Comercio, Taxistas, etc.) exhortaron “a que los cortes de ruta sean levantados y se dé lugar a un dialogo sin condicionamientos” y apuntaron contra “sectores intransigentes que nada tienen que ver con la Salud”, que –dicen- apuestan a profundizar el conflicto y “satisfacer otros objetivos”.
Al parecer, más allá de la nueva oferta, el conflicto aún está lejos de resolverse.