Esta semana los medios nacionales se concentraron en la ordenanza aprobada en el Concejo Deliberante de Avellaneda, cuyo intendente es el mismísimo Ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación Jorge Ferraresi. El polémico proyecto basado en un Decreto Ley provincial dictado en plena dictadura militar -8912/77- graba con hasta un 50% de impuestos adicionales a los inmuebles baldíos, con edificación derruida o paralizada, habilitando el camino a la expropiación municipal.
Con el correr de los días, comenzaron a aparecer noticias de otros Municipios que sin tanto revuelo, aprobaron con trámites rápidos proyectos similares. Es el caso de San Vicente, cuyo Intendente Nicolás Mantegazza, cuyo padrino político es el Intendente de Lomas Martín Insaurralde, promovió una Ordenanza aprobada en febrero de este año (N°5163) en la que crea un “Banco de Tierras e Inmuebles de la Municipalidad de San Vicente”. La comunidad Sanvicentina, que incluye dentro de su partido a las localidades de Alejandro Korn y Domselaar, se desayunó con este tema por la repercusión del caso Avellaneda, pese a que oportunamente los Concejales de Juntos por el Cambio habían rechazado el proyecto.
Básicamente la Ordenanza crea un registro en el cual detectar propiedades ejecutables o expropiables, y establece una finalidad de los fondos que surjan para destinar a la construcción de viviendas, prevé la posibilidad de asignar directamente una propiedad en desuso a alguna “organización con fines públicos”, y curiosamente, faculta al Intendente a realizar negociaciones y transacciones con los fideicomisos de los barrios privados que proliferan en la Ruta 58 que une el corredor Canning-San Vicente. El dirigente radical Marcelo Di Stefano, consultado por Infodata35 expresó que “se trata de un relato peligroso, que ilusiona a los vecinos que necesitan acceder a la vivienda, pero que en el fondo se funda en el incumplimiento de las promesas electorales, el aumento de la toma de tierras, y esconde negociados inmobiliarios” y agregó “presentan un plan de viviendas sin financiamiento, y sin decir cómo lo van a hacer, cuando va a estar terminado, donde se harán las obras, y para quién está destinado, es una muestra más de una gestión sin rumbo”.
San Vicente en los últimos tiempos se ha convertido en un distrito en el cual se replican las peores prácticas de la política. Vacunados Vip que devienen en la renuncia de las máximas autoridades de Salud para apagar el escándalo, funcionarios con pesados antecedentes penales como el sumariado ex Secretario de Seguridad que terminó despedido ante el repudio popular, y ahora suman una dudosa política de tierras, que pareciera destinada a justificar el blanqueo de los catastros de los barrios cerrados a cambio de transacciones sin control.