Dos videos de cámaras de seguridad se viralizaron y levantaron decenas de opiniones: desde un espíritu pasando por intereses creados hasta una falla técnica. ¿Realidad, atentado al buen nombre o broma?
“Las imágenes son ciertas, pero la historia no”. Así dijo personal a cargo de la investigación que se inició en el Sanatorio Finochietto al diario La Nación, acerca de los videos que se tomaron la noche del jueves pasado y que muestran un presunto caso de invisibilidad en los pasillos del establecimiento.
La puerta que se abre sola, al momento de tomar las imágenes, estaba rota. “Es la puerta de uno de los ingresos que está abierto fuera de las horas de atención; el ingreso a la guardia. Como estaba rota, durante las 10 horas de la noche se abrió sola 28 veces entre la noche del jueves y la madrugada del viernes”, explicaron.
Además, “no hay un registro de ingreso de ninguna persona a esa hora. Este señor emula estar escribiendo algo, pero cuando vas al registro no aparece nadie”. Las sospechas la generan que ese hombre trabaja con dos personas más y que, en ese momento, una de ellas estaba haciendo otras tareas y la otra había ido al baño.
Las fuentes coincidieron que, en principio, se trataría de una “broma de mal gusto” que habría sido “muy bien estructurada” y que generó esta “historia fantástica”. El informe de quien aparece en el video es incoherente. “De lo que estamos seguros, es que no se trata de ningún fenómeno paranormal”, reiteraron.
La preocupación de las autoridades del sanatorio es el tema de la seguridad. Se sospecha que quizá minar este aspecto del ofrecimiento de la empresa de salud haya sido el objetivo o que simplemente se tratara de una broma. Se sigue investigando el caso que fue muy comentado desde las subidas a internet.
