Las petroleras Axion y Raizen (Shell) aumentaron entre un 11 % y un 12 % los precios de sus combustibles mientras que un día después, hoy lunes, YPF los incrementó un 9 %. No es novedad para 2022: se trata de la tercera suba.
Con este nuevo ajuste las naftas acumulan un incremento que supera al 30 % en 2022, siendo notablemente más alto de la ya muy elevada inflación, que en abril acumuló un 20,3 %.
Los precios de referencia de Axion se establecieron en:
Súper: $122,7
Quantium: $150,2
Diésel X10: $120,3
Quantium Diésel: $144,3
De Raizen-Shell:
V-Power: $149,5.
Súper: $123,2.
V-Power Diésel: $145,2.
Shell Evolux Diésel: $118,2.
De la petrolera estatal YPF:
Súper: $120,3.
Infinia: $147,3.
Diésel: $113,4.
Infinia Diésel: $145,9.
El nuevo incremento en las estaciones de servicio se debe a la suba de las distintas variables que inciden en el precio de venta al público, como la disparada del Brent, que este lunes cotizaba U$S 113, y el desfasaje entre ingresos y costos por la inflación.
Los estacioneros ya avisaron que el precio aún se encuentra por debajo del punto de equilibrio óptimo que necesitan para operar, ya que deben compensar el desfasaje del año pasado, cuando las naftas aumentaron, en promedio, 30 % y la inflación fue del 51 %.
«Desde hace cuatro años estamos operando en modo supervivencia. Primero fue la recesión, luego la pandemia y ahora un contexto económico de incertidumbre, marcado por nuevos picos de inflación, el atraso en los precios, la escasez de combustibles», advirtió Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha).